¿Qué factores afectan tu experiencia con el cannabis?

Seguramente te ha pasado. Un día consumes cannabis y tienes una excelente experiencia que te gustaría replicar. “No hay problema”, piensas. “Todavía tengo de esa cepa”. Pero, la próxima vez, tu experiencia es otra. Peor o mejor. O ninguna; quizás igual de excelente que la anterior, solo… diferente. Esto es más común de lo que crees. Los factores que afectan tu experiencia con el cannabis son muchos. Algunos, los puedes controlar; otros no—tienes que vivir con ellos.

Los Factores físicos afectan tu experiencia con el cannabis

Tolerancia

Te puedes volver tolerante al cannabis. Entre más lo consumes, más se acostumbran los receptores de tu cerebro a él. Una manera simple de saber si está aumentando tu tolerancia es, simplemente, darle seguimiento a cuánto debes consumir para sentir los mismos efectos que antes.

Puede ocurrir que el cannabis deje de provocarte efecto alguno. Esto puede ser problemático, más allá para quienes lo usan con fines recreativos, para aquellos que lo usan para tratar algún mal. Por ello, muchos se toman una pausa de tolerancia para disminuir su tolerancia.

Pero ningún cerebro es idéntico a otro. La tolerancia también varía de persona a persona. Es decir, algunos son más tolerantes que otros por naturaleza y aunque nunca hayan consumido cannabis. Y es que existen otros factores físicos que afectan tu experiencia con el cannabis.

Edad

La tolerancia también varía con la edad. Aunque no está absolutamente comprobado, se cree que los adolescentes tienen una mayor tolerancia a personas mayores.

Además de poder consumir más, los jóvenes también reciben efectos más placenteros. Es común que los usuarios de mayor edad dejen de consumir cannabis porque les provoca ansiedad y estrés y ven afectadas sus funciones motoras.

Por supuesto, esto no está escrito en piedra. Hay muchas personas de la tercera edad que pueden disfrutar de los efectos del cannabis por siempre, mientras que este no les provoca ningún placer a muchos adolescentes.

Fisonomía

Los efectos que nos causa el cannabis tienen mucho que ver con cómo lo absorbemos. Esto no solo involucra al método de consumo (que veremos más adelante), sino a nuestro físico en general.

Factores como la altura, el índice de grasa corporal, la química sanguínea… es decir, cómo estamos formados, puede retrasar los efectos del cannabis o hasta cambiarlos del todo. No es de sorprenderse que dos personas que consumen la misma cepa, al mismo tiempo, tengan experiencias muy distintas.

Predisposición genética

Hay personas más predispuestas a ciertas condiciones mentales que otras por simple genética. Condiciones que, sabemos, el cannabis puede causar o exacerbar, especialmente aquél con altos índices de THC.

Generalmente se advierte que, quienes son propensos a sufrir de ansiedad, eviten consumir mucho THC o que lo hagan en dosis pequeñas, tomándose su tiempo.

El tipo de cannabis también afecta tu experiencia

Cepa

Suena obvio, pero muchos no saben que no hay un solo tipo de cannabis. Conforme se van relajando las leyes que rigen su consumo, cada vez tenemos mayor acceso a distintas cepas que, por supuesto, tienen una gran variedad de efectos.

Cuáles y cómo ocurren dependen principalmente (aunque no exclusivamente, como veremos en el siguiente apartado) del índice de cannabinoides que contiene. Los efectos del THC, el sospechoso más común de causarnos el “viaje”, varían de acuerdo a los demás cannabinoides con los que interactúa.

Tiene la capacidad, por ejemplo, de potenciar los efectos del CBD. Por eso, muchas medicinas para la ansiedad contienen altos índices de éste mezclado con un poco de THC, a pesar de que el medicamento no es intoxicante. El CBD, por otro lado, puede disminuir los efectos secundarios desagradables del THC.

Por eso, cada vez son más populares las cepas con mezclas de ambos cannabinoides por encima de aquellas que contienen solo uno.

Terpenos

Los terpenos son los compuestos que les dan su aroma a las plantas, incluyendo al cannabis. Son los principales responsables de que algunas cepas huelan a mango o a naranja; a vainilla o a gasolina. Sin embargo, también se cree que juegan un rol en sus efectos.

Los terpenos tienen aplicaciones como relajantes o hasta como desinflamatorios o analgésicos. Quizá no hagan mucho por su propia cuenta, pero se cree que, en combinación con otros elementos, como los cannabinoides, podrían potenciar su efectividad y así afectar la experiencia del consumidor.

Los factores en tus hábitos que afectan tu experiencia con el cannabis

Ambiente

Muchos no lo toman en cuenta, pero el ambiente tiene un gran impacto en nuestra experiencia con el cannabis. Y, cuando lo consideramos por un momento, tiene lógica.

El cannabis no nos desconecta totalmente de la realidad como algunos alucinógenos y, por lo tanto, seguimos respondiendo a estímulos exteriores. Ciertamente no es lo mismo consumir cannabis en un ambiente social, como una reunión o fiesta, que la misma cantidad y cepa en solitario.

Método de consumo

Evidentemente, los diversos métodos de consumo afectan tu experiencia con el cannabis. Los más populares, el porro, la pipa y el bong, por ejemplo, producen efectos prácticamente inmediatos y suelen ser dosis continuas—cada que das una fumada o “golpe”.

Se cree que las dosis de comestibles, en general, son más fuertes y menos frecuentes. También tardan mucho más tiempo en surtir efecto (hasta horas, a veces). Esto es porque, a diferencia de otros métodos, deben ser absorbidos por el aparato digestivo. Además, sus efectos son más duraderos.

Finalmente, métodos como el dabbing resultan—quizás—en los efectos más pronunciados, pero, también, permiten medir las dosis con mayor exactitud.

Dosis

Finalmente, tocamos en el rubro más obvio de los factores que afectan tu experiencia con el cannabis: el tamaño de la dosis que consumes ciertamente afecta tu experiencia con el cannabis.

Antes dijimos que las dosis grandes pueden conducir a la tolerancia; pero esta, a su vez, puede llevar a la dependencia y a la adicción.

El tamaño de la dosis es especialmente importante para aquellos consumidores primerizos. Esto también incluye a quienes están probando un tipo de cannabis o un método nuevo de consumo, por primera vez, sin importar cuánto solían consumir antes.Siempre se recomienda empezar con dosis pequeñas e ir aumentándolas poco a poco hasta alcanzar los efectos deseados y no exagerar. Consume cannabis con responsabilidad.