¿Las Semillas Viejas de Marihuana Germinan?
Es común que, con el tiempo, las semillas de marihuana se endurezcan y a veces no germinen. Ante esta situación, muchos cultivadores las descartan sin saber que, con una modificación en el proceso, las semillas viejas de marihuana sí pueden germinar.
¿Por Qué las Semillas Viejas de Marihuana No Germinan?
Con el tiempo, los cultivadores de marihuana se enfrentan a semillas que parecen incapaces de germinar. La razón más frecuente de este problema es la vejez de las semillas. Sin embargo, el hecho de que una semilla no germine no significa que la planta dentro de ella esté muerta. De hecho, muchas semillas viejas pueden germinar con éxito si se les brinda el cuidado adecuado.
Para que una planta crezca, necesita agua, y la corteza de la semilla es permeable, permitiendo la entrada del agua. Con el tiempo, esta corteza se endurece y dificulta el paso del agua, lo que impide que la planta pueda romperla y comenzar a crecer.
¿Cómo Hacer Que Germinen las Semillas Viejas de Marihuana?
Afortunadamente, existen varias formas de ayudar a las semillas viejas a germinar. El primer paso es hidratarlas adecuadamente. Mientras que para las semillas jóvenes, un simple paño húmedo es suficiente, en el caso de las semillas viejas, se requiere un enfoque más intensivo. Es necesario aumentar la cantidad de agua a la que están expuestas y, en algunos casos, incluso romper la corteza de la semilla para facilitar el paso del agua a la planta en su interior.
Métodos para Hacer Germinar Semillas Viejas
Existen diversos métodos que los cultivadores pueden emplear para ayudar a que las semillas viejas de marihuana germinen:
- Remojarlas en agua: Un método simple consiste en sumergir las semillas en un vaso de agua durante 12 horas para ablandar la corteza. Es importante retirarlas antes de 24 horas para evitar que se ahoguen. Si las semillas no germinan tras este tiempo, se puede intentar nuevamente utilizando agua carbonatada o añadiendo peróxido de hidrógeno para incrementar el nivel de oxígeno en el agua.
- Lijar o romper la corteza: Otro método eficaz es reducir el grosor de la corteza externa de la semilla. Para ello, se puede lijar suavemente la semilla o, con mucho cuidado, romper la corteza con una herramienta como un cascanueces o pinzas. Esto ayuda a que el agua penetre más fácilmente y alcance la planta en su interior.
- Cortar la cresta: En casos más extremos, cuando las otras técnicas no funcionan, es posible cortar la cresta de la semilla con un cuchillo afilado. La cresta es la protuberancia donde se unen las dos mitades de la corteza. Este procedimiento debe hacerse con mucha cautela para no dañar la planta dentro de la semilla.
Las semillas viejas de marihuana pueden ser difíciles de germinar, pero con los métodos adecuados, es completamente posible hacerlo. No es necesario desechar las semillas viejas; con un poco de paciencia y las técnicas adecuadas, puedes hacer que germinen y continuar el ciclo de cultivo de manera exitosa.