Cómo hacer té de cannabis sin flor

Cómo hacer té de cannabis sin flor

El té es una manera muy conveniente de consumir cannabis; pero, en ocasiones, tiene sus inconvenientes. La más común: falta de flor. Que no cunda el pánico, ya que no todo está perdido. Y es que puedes hacer té de cannabis sin flor.

¿Qué es el té de cannabis?

El té de cannabis funciona prácticamente como el resto de los tés: solo hay que poner a remojar la flor, que contiene los cannabinoides y terpenos, en agua caliente y beber el resultado. Sin embargo, si estás buscando efectos similares a fumarlo, comerlo o evaporarlo, es posible que el té te decepcione si no sigues unos cuantos pasos extra.

Y es que el THC, el principal responsable de causarnos los “viajes” de cannabis, no se disuelve el agua. Para que surta efecto es necesario agregar grasa, como mantequilla o aceite. Con ello, tu té podrá causarte los mismos efectos que los comestibles.

Qué se usa para hacer té de cannabis sin flor

Quizá quieras probar el té de cannabis, pero crees que usar tu reserva de cannabis es un desperdicio, o bien, no tienes suficiente. Por suerte, hay maneras de hacer té de cannabis sin usar la flor.

Si tienes un cultivo de cannabis, generalmente se recomienda que almacenes los restos de la planta cuando deshojes las flores, ya que pueden ser muy útiles—y este es uno de esos casos. Y es que los tallos, ramas, hojas y demás material de la planta sobrantes también contienen THC.

Receta

Para preparar una sola taza de té de cannabis sin flor solamente necesitas ¼ de taza de tallos de cannabis; 1 cucharada de grasa, que puede ser mantequilla, aceite de coco o algún otro producto similar; además, las hojas y ramas de cannabis que quieras.

Antes de preparar el té, puedes descarboxilar los tallos para activar el THC. Si no lo haces, recibirás los beneficios del compuesto del que proviene, el THCA. El resto de la receta es la misma.

Hierve el agua: 1 sola taza si quieres un té más concentrado; 2 ó 3 si lo quieres más ligero—no solo nos referimos al sabor sino a sus efectos. Añade la grasa y disuélvela. Mete los tallos y las hojas a un filtro de té y sumérgelos en el agua caliente.

Espera 10 minutos y listo, tienes un té muy decente sin haber usado tu reserva de flor de cannabis.