¿Cómo se utiliza un burbujeador de cannabis?
Los burbujeadores, en resumen, son pipas para fumar cannabis que cuentan con una cámara de agua. Aunque suelen ser simples de manejar, algunas personas encuentran su diseño un tanto complejo y, por ende, algo intimidante. Por esta razón, te enseñaremos cómo se utiliza un burbujeador de cannabis, tanto para fumar con él como para limpiarlo.
¿Qué es un burbujeador?
Los porros, las pipas y los bongs son las formas más comunes de consumir cannabis. Sin embargo, existe una cuarta opción que se encuentra entre estas dos últimas: los burbujeadores. En esencia, los burbujeadores son pipas que incorporan una cámara adicional que se llena con agua. Al fumar cannabis con ellos, se produce un sonido de burbujas, similar al sonido de un bong, de ahí su nombre.
Los burbujeadores proporcionan una inhalación más suave en comparación con las pipas, ya que el agua actúa como filtro, enfriando el humo y reduciendo la irritación en la garganta. No obstante, debido a su tamaño más reducido, el agua no tiene el mismo efecto en inhalaciones más intensas.
¿Cómo se utiliza un burbujeador?
A pesar de ser más complicados que las pipas convencionales, en general, la manera como se utiliza un burbujeador de cannabis es bastante sencilla.
Lo primero es llenar la cámara de agua. Debe cubrir la parte inferior del tubo, pero es crucial evitar llenarla en exceso para evitar desbordamientos.
Al igual que con las pipas, es importante triturar la hierba antes de colocarla en la cazoleta. Sin embargo, no la tritures demasiado fina, ya que debe permitir la circulación del aire. Coloca un filtro en la cazoleta para evitar que la hierba caiga al agua y llénala con la hierba triturada.
Enciende la hierba mientras inhalas. Los burbujeadores que tienen un carburador te permiten controlar el flujo del aire para inhalar golpes más intensos o más suaves.
¿Cómo se limpia un burbujeador?
Debido a su tamaño, la limpieza de los burbujeadores puede ser fácil o difícil. No obstante, es recomendable limpiarlos después de usarlos un par de veces. Sigue estos pasos según tu tipo de burbujeador.
Si tu burbujeador tiene piezas desmontables, retíralas y sumérgelas en agua tibia. Luego, colócalas en una bolsa con cierre hermético junto con agua, un poco de alcohol y una cucharadita de sal, y déjalas reposar durante aproximadamente media hora. Si el material de tu burbujeador lo permite, agita la bolsa después de este tiempo.
Si dispones de un cepillo del tamaño adecuado, como los utilizados para limpiar pipas, úsalo para frotar las partes de difícil acceso.
Enjuaga las distintas piezas con agua tibia y deja que se sequen por completo antes de volver a armar tu burbujeador.