Consejos para almacenar concentrados y comestibles

Consejos para almacenar concentrados y comestibles

Consejos para almacenar concentrados y comestibles

Una vez que cultivaste, hiciste o cocinaste tus productos de cannabis, hay que almacenarlos. Sin embargo, no se trata solo de meterlos a una bolsa de plástico y guardarlos en la alacena o el refrigerador. De esa manera se pueden echar a perder fácilmente o, peor aún, ser encontrados por alguien que no debería encontrarlos. Aquí te damos unos consejos para almacenar concentrados y comestibles.

¿Para qué almacenar los concentrados y comestibles?

El cannabis es perecedero. Es decir, si no se almacena correctamente, se echará a perder en solo unos días. Esto es especialmente lamentable cuando se trata de productos que hiciste tú mismo, como los comestibles y, sí, algunos concentrados.

Cualquiera que sea el caso, al almacenar productos se alejan de los factores que pueden estropearlos. Por ejemplo, la luz directa y las fuentes de calor. En el caso del cannabis, la humedad es un factor especialmente riesgoso, ya que los cannabinoides están en constante contacto con ella—incluso después de cultivado—y se debe mantener un balance apropiado.

Los contenedores importan

En general, no se recomienda almacenar concentrados y comestibles en un contenedor cualquiera. Usa uno que, como mínimo, pueda cerrarse—si es hermético, mejor.

El material también importa. Es ampliamente aceptado que el vidrio es el mejor, como los frascos de conservas. El plástico tiende a sudar y ya sabemos que el exceso de humedad es letal para los productos de cannabis. Para almacenar productos pegajosos, envuélvelos antes en papel encerado para que no se peguen al vidrio.

Una cosa más: los recipientes opacos funcionan mejor, pues no dejan pasar la luz, aunque abras la puerta del refrigerador constantemente.

Más consejos para almacenar concentrados y comestibles

Es indispensable que sepas exactamente cuándo almacenaste tus productos para calcular su frescura; escribe la fecha con un plumón en el mismo frasco mismo. Adicionalmente, si es posible, lo mejor es usar un refrigerador o frigobar aparte para el uso exclusivo de los productos de cannabis. De esta manera, se mantiene a los productos alejados de los niños y la puerta no se abre tan seguido, evitando la luz y los cambios de temperatura.