Estudio: El cannabis no es una droga de entrada

Estudio: El cannabis no es una droga de entrada

El cannabis no es una droga de entrada

Son ya muchas décadas que hemos escuchado que el cannabis es una droga de entrada. Es decir, que su consumo conduce al de otras sustancias más dañinas. Ahora, un estudio de la Universidad de Colorado, aprovechando su legalidad, pone esta supuesta propiedad de la marihuana bajo la lupa.

¿Qué es una droga de entrada?

El concepto de “droga de entrada”, también llamadas “de acceso” o “de inicio” ha sido ligado al cannabis desde la década de los 30, aunque también se dice que la nicotina y el alcohol son drogas de entrada. Se refiere a su potencial de conducir al uso, y abuso, de drogas más fuertes, como la cocaína o la heroína.

Según la teoría, con el uso, los usuarios buscarán experiencias más intensas que lo que estas sustancias pueden brindarles. Se sabe, por lo menos con el cannabis, que su uso puede generar tolerancia; pero no suele conducir a consumir más. Más bien, irónicamente, lleva a pausas de tolerancia.

Ahora, un nuevo estudio parece confirmar que la idea de que el cannabis es una droga de entrada es arcaica y sin mucho mérito.

El cannabis no es una droga de entrada

Ahora que el cannabis se ha legalizado en varias partes del mundo—y, especialmente, en varios estados de Estados Unidos—, se ha observado su impacto en el consumo de otras sustancias.

Con datos de la Universidad de Colorado y la Universidad de Minnesota—en el primero el uso lúdico de cannabis es legal; en el segundo, no—, el estudio observó a un grupo de 4,000 gemelos. Se usan gemelos porque así se eliminan muchas variables, ya que comparten niñez, desarrollo, tanto económico como físico; y, claro, edad y ADN.

El estudio, llevado a cabo por la Universidad de Colorado en Boulder, descubrió que no hay factores significativos que indiquen un aumento del consumo de drogas a partir de la legalización del cannabis en ese estado en 2012. Tampoco encontró un aumento de problemas de índole cognitiva, psicológicos, sociales o financieros en la ciudadanía.

Sí se descubrió, sin embargo, una reducción de los problemas ocasionados por el consumo de alcohol.

Limitantes

Es importante señalar, sin embargo, que el estudio tiene varias limitantes de importancia.

Como vimos, los grupos provienen solamente de dos estados y son, en su gran mayoría, compuestos por personas caucásicas. Y es que existe un desbalance de sanciones legales cuando se considera a miembros de otras comunidades, como afroamericanas o latinas. Además, el estudio se enfocó en individuos con un bajo consumo de cannabis y otras sustancias.

Sin embargo, estudios como este abren las puertas a más investigaciones que nos digan más sobre el impacto que el cannabis ha tenido desde su legalización, así como sus beneficios—o daños—para la salud.