Producción y distribución del Kratom
El Kratom, una planta asiática utilizada tanto por sus propiedades medicinales como por sus efectos psicotrópicos, ha captado la atención de los consumidores en Europa y Norteamérica. Sin embargo, su estatus legal en estas regiones sigue siendo incierto e inestable. A pesar de esto, la producción y distribución del Kratom se llevan a cabo de manera bastante convencional, similar a la de otros productos farmacéuticos comunes.
¿Cómo es la producción del Kratom?
El Kratom proviene de la planta Mitragyna speciosa, originaria de Tailandia y otras regiones del sudeste asiático como Indonesia, Malasia y Papúa Nueva Guinea. El proceso de cultivo es manual: las hojas se cosechan, se secan y luego se muelen para obtener un polvo fino. Además del polvo, el Kratom se transforma en extractos y cápsulas, que se empaquetan y distribuyen tanto local como internacionalmente.
¿Cómo es la distribución del Kratom?
El Kratom se exporta desde sus países de origen por vía marítima y aérea, principalmente hacia Europa. Una vez en los puertos y aeropuertos, se distribuye a diferentes países como cualquier otro producto farmacéutico. Los importadores deben cumplir con las leyes y regulaciones locales para garantizar un consumo seguro. Al igual que otros productos controlados, el Kratom se vende en establecimientos especializados y también se puede adquirir en línea.
¿El Kratom es legal?
La legalidad de la producción y distribución del Kratom en Europa varía según el país. En el Reino Unido, su consumo está regulado pero permitido, mientras que en España solo es legal bajo circunstancias específicas, como la investigación científica. En Polonia y Dinamarca, el Kratom está completamente prohibido. En Estados Unidos, la situación es particular: a nivel federal está permitido, pero algunos estados lo prohíben categóricamente.