El Karkubi: Una Droga Hecha de Medicamentos
El Karkubi es una droga que ha cobrado notoriedad en los últimos años, especialmente en el norte de África y el suroeste de Europa. Aunque su consumo ha sido común en Marruecos durante décadas, su expansión hacia Europa ha encendido las alarmas de las autoridades. Esta sustancia, también conocida como “la droga de los pobres”, pues es una droga hecha de mezclar medicamentos y otros ingredientes que producen efectos devastadores en quienes la consumen.
¿Qué es el Karkubi?
El Karkubi es una droga compuesta principalmente por medicamentos como ansiolíticos, antidepresivos y antiepilépticos. Entre los componentes más comunes se encuentran el clonazepam, la sustancia activa del Rivotril, y el fenobarbital, un barbitúrico utilizado en el tratamiento de la epilepsia. Estos medicamentos, en combinación con el majoun, una pasta hecha de hachís o kief, y otros ingredientes dulces como miel, higos, frutos secos, jengibre, canela y anís, crean una mezcla que resulta en una sustancia altamente adictiva y peligrosa.
La preparación del Karkubi no sigue un proceso estandarizado, ya que la disponibilidad de los ingredientes puede variar. Es común que se utilicen medicamentos caducados, lo que reduce su costo de producción. El producto final generalmente se presenta en forma de comprimidos o cápsulas, lo que facilita su distribución y reduce el riesgo de detección por parte de las autoridades. Además, su bajo precio ha hecho que sea accesible para un amplio sector de la población, lo que le ha otorgado el apodo de “la droga de los pobres”.
Efectos del Karkubi en el Consumidor
Los efectos del Karkubi son extremadamente potentes y peligrosos, lo que lo convierte en una sustancia altamente destructiva. Al estar compuesto por medicamentos como clonazepam, fenobarbital y derivados del cannabis, los consumidores experimentan una combinación de efectos sedantes y psicoactivos que afectan gravemente sus capacidades cognitivas y motoras.
Entre los efectos más comunes se encuentran alucinaciones que inducen comportamientos erráticos, agresivos y violentos. Estos comportamientos suelen estar exacerbados por una sensación de invencibilidad, lo que lleva a los consumidores a tomar riesgos extremos. Además, la combinación de sustancias afecta la memoria, causando amnesia temporal y, en algunos casos, los usuarios no recuerdan haber ingerido la droga.
El consumo prolongado de Karkubi puede llevar a una rápida tolerancia, lo que obliga a los usuarios a aumentar las dosis para lograr los mismos efectos, incrementando así el riesgo de sobredosis. Los efectos secundarios más graves incluyen intoxicaciones que pueden resultar en coma o muerte. Además, el abuso de sedantes puede llevar a una resistencia a las anestesias, complicando cualquier procedimiento médico que requiera su uso, como las cirugías.
Una Droga Hecha de Medicamentos se Expande
Aunque en Europa se ha comenzado a tomar conciencia sobre los peligros del Karkubi, esta droga lleva circulando en el norte de África desde los años setenta. En sus inicios, la mezcla de medicamentos con hachís y alcohol era común entre los jóvenes de bajos recursos en Marruecos y Argelia, quienes veían en esta combinación una forma barata de evadirse de la realidad. Con el tiempo, la receta ha evolucionado, pero la esencia sigue siendo la misma: una droga accesible con efectos devastadores.
Un Proceso de Distribución Circular
El tráfico de Karkubi sigue un patrón circular que comienza con el robo de identidad y la falsificación de recetas médicas en Europa, donde se adquieren los medicamentos necesarios para su fabricación. Posteriormente, estos medicamentos son enviados a laboratorios clandestinos en Marruecos y otras regiones del norte de África, donde se mezcla con otros ingredientes para producir la droga final. Una vez fabricada, la droga regresa a Europa, donde se distribuye en regiones específicas, siendo España uno de los principales puntos de consumo.
Una Droga Hecha de Medicamentos Después de la Pandemia
La pandemia de COVID-19 tuvo un impacto significativo en el consumo de drogas en Europa, y el Karkubi no fue la excepción. Durante los largos meses de confinamiento, muchas personas recurrieron a sustancias como esta para hacer frente al estrés y la ansiedad. En España, uno de los países más afectados por las restricciones, el consumo de Karkubi aumentó considerablemente debido a su bajo costo y fácil disponibilidad.
Desde entonces, el problema ha escalado, con un aumento notable en el tráfico de benzodiazepinas y barbitúricos desde España hacia Marruecos. También se han descubierto laboratorios dedicados a la fabricación de Karkubi en territorio español, lo que ha llevado a las autoridades a intensificar las medidas de control. En enero de 2022, se confiscaron más de 500,000 pastillas en tránsito entre ambos países, lo que puso en evidencia la magnitud del problema.
El Karkubi es una droga con efectos devastadores que, aunque lleva décadas circulando en el norte de África, ha comenzado a ganar terreno en Europa. Su bajo costo y facilidad de producción han hecho que se convierta en una opción atractiva para personas de bajos recursos, lo que la ha llevado a ser conocida como “la droga de los pobres”. Sin embargo, sus efectos en la salud son extremadamente peligrosos, lo que la convierte en una amenaza creciente para la sociedad. Es crucial que se continúen intensificando los esfuerzos para frenar su producción y distribución, así como para concienciar a la población sobre los riesgos asociados con su consumo.