Cómo preparar fertilizante para las plantas
No hay duda que la fertilización es indispensable si quieres cosechar flores de cannabis grandes y jugosas. Sin embargo, la cantidad errónea podría poner en peligro a toda la cosecha. Por eso es indispensable aprender cómo preparar el fertilizante de las plantas, así como la manera para saber si están absorbiendo los nutrientes necesarios.
¿Para qué se utiliza el fertilizante para las plantas?
Si bien las plantas son perfectamente capaces de crecer por sí solas sin la intervención de los agricultores, los fertilizantes tienen una función adicional. Durante la última etapa de desarrollo, el cannabis produce flores que después son cosechadas, secadas, curadas, almacenadas y consumidas. Además de la cepa, su calidad depende cuántos de cannabinoides y terpenos contienen.
Los fertilizantes las impulsan a crecer más, más rápido y más sanas, gracias a lo cual producen flores más grandes y jugosas. Y más resina significa más cannabinoides y terpenos. En otras palabras, los fertilizantes ayudan a la creación de cepas más sabrosas y con mayores efectos.
Cómo preparar fertilizante para las plantas
Ante todo, se necesita agua que esté entre los 19 y los 21º centígrados. La absorción de las raíces se reduce a bajas temperaturas. A temperaturas superiores, por otro lado, se pueden desarrollar colonias de patógenos dañinos.
Añade el fertilizante y/o abono. Cada producto tiene su propia receta y, por lo tanto, rangos distintos de nutrientes. Por ello, es altamente recomendable seguir las instrucciones de todos y cada uno. La receta de una marca no necesariamente funciona con otra.
La información del producto debería especificar el pH de la mezcla. Si es necesario alterarlo, existen productos para ello que suelen ser a base de ácido nítrico o fosfórico.
Una vez listo, solo agrega el fertilizante a tus plantas. Para saber si están absorbiendo los nutrientes, se debe medir las partes por millón y la conductividad eléctrica.
¿Qué son las partes por millón y la conductividad eléctrica?
Ambos valores representan la base para determinar cuántos nutrientes necesitan las plantas. De hecho, antes de agregar cualquier tipo de fertilizante se recomienda medir ambos valores (acotados PPM y EC) del sustrato.
Y es que, si éste ya tiene nutrientes podrían superarse los valores recomendados. En lugar de beneficiar a las plantas, esto puede provocarles algún tipo de toxicidad. Es decir, demasiados nutrientes tampoco es algo bueno; las raíces pueden bloquearse y dejar de absorberlos. La única solución, cuando eso ocurre, es drenarlas.