Cómo crear nuevas cepas en casa

Si llevas tiempo cultivando tu propio cannabis, quizá te hayas empezado a interesar en crear nuevas cepas en casa—cepas propias. Si ese es el caso, te dará gusto saber que no necesitas una carrera en genética vegetal, o de ningún tipo, ni ninguna otra disciplina científica—solo tu experiencia. Lo que sí necesitas es un espacio de cultivo más grande, un conocimiento básico de la anatomía del cannabis y mucha, mucha paciencia.

¿Se pueden crear nuevas cepas de cannabis en casa?

Como crear cepas nuevas o repetir las que son exitosas tiene que ver con la genética de las plantas, muchos agricultores creen que para ello se necesita una carrera en alguna disciplina científica. Pero la verdad es muy distinta.

De hecho, si la historia moderna de la marihuana tiene un lugar de origen, ese está en los cultivos caseros del agricultor común. Ahí se descubrió que el cannabis puede tener una variedad de efectos; que esas variaciones se pueden preservar; que se pueden combinar con otras para aumentar la selección.

Por supuesto, se requiere de experiencia, pero esa solamente resulta de plantar, cuidar y cultivar cannabis. Después de un tiempo cultivándolo (lo que incluye alterar la cantidad de aire, agua, luz que recibe) estarás listo para intentar crear tus propias cepas.

¿Cómo se preserva la genética de las cepas?

Alguna vez, quizá te habrás encontrado en tu cultivo con que una planta dio flores particularmente buenas. Puede ser su sabor, aroma o sus efectos, seguramente te preguntaste cómo repetirla. Es decir, cómo preservar su genética para reproducirla.

Clones

Los clones son la manera más básica de mantener la genética de las plantas de una generación a la otra. Se obtienen simplemente cortando una rama de la planta madre para plantarla. Ésta tiene, evidentemente, una copia exacta del código genético de la planta madre, por lo que, al echar raíces, resultará en una planta idéntica a la anterior. Este proceso tiene la ventaja de que no es necesario germinar semillas y el ciclo de cultivo es más rápido.

La autofertilización

Cuando hablamos de cannabis, existen tres géneros: femenino, masculino y hermafrodita. Como los cultivos constan de plantas exclusivamente femeninas, estos dos últimos suelen evitarse a toda costa. Sin embargo, cuando se trata de preservar la genética de las plantas, las plantas hermafroditas tienen un uso muy particular.

Si se somete a una hembra a estrés, ésta se puede transformar en hermafrodita. Esto quiere decir que desarrollará órganos sexuales masculinos—sacos de polen—junto con los femeninos. Y, con ellos, la habilidad de autofertilizarse. Las semillas que resultan de este proceso, a diferencia de una polinización normal, tienen solamente la información genética de la planta madre. Además, son semillas feminizadas.

Cómo crear nuevas cepas en casa

Existen varias maneras y métodos de crear nuevas cepas en casa. Algunas son más sencillas que otras, pero todas pueden llegar a dominarse con la experiencia y la práctica. Aquí te contamos cuáles son las más básicas.

Cruce normal de plantas

En cualquier cultivo se puede hacer un cruce normal de plantas. Solo se necesita un bonche de semillas normales que tienen un 50% de probabilidades de convertirse en plantas macho o hembra.

Generalmente se retira a los machos del cultivo tan pronto son identificados. Sin embargo, también se puede crear un cultivo aparte y dedicarlo al cruce y cría de plantas nuevas, ya sea externo o interno.

La lección número 1 de crear nuevas cepas en casa sería, en todo caso, cruzar dos plantas y estabilizar su descendencia. Es decir, que las siguientes generaciones tengan características prácticamente idénticas entre sí.

Polihíbridos

Todo el cannabis que circula hoy en día proviene de unas cuantas cepas originales de características variables. Al cruzarlas, éstas se combinan y se producen los híbridos. Cuando estos híbridos, a su vez, se cruzan, sus características vuelven a combinarse y se producen polihíbridos.

Como podrás imaginarte, una vez que se estabilizan los polihíbridos, la variedad de características (efectos, sabores, aromas, resistencias…) crece exponencialmente. De ahí, que existan cepas para todo tipo de cosas, ya sea para uso lúdico o medicinal.

Cómo crear nuevas cepas en casa con polihíbridos

Si te interesa lo que has leído hasta ahora y te gustaría intentar crear nuevas cepas con polihíbridos, lo primero que debes saber es que necesitarás más espacio que antes. Básicamente, ahora necesitas dos cultivos: una zona de cría y una zona de cruza. Dada que esta última contendrá las plantas macho, debe estar separadas por una distancia suficiente para evitar que se contaminen una a la otra.

Identifica cuando se desarrollan los sacos de polen. Cuando éstos se abran, cubre la planta con una bolsa de plástico y agítala para cultivar el polen. El momento propicio para la fertilización es cuando las hembras empiezan a producir flores; cuando sus pistilos desarrollan unos pequeños pelos.

Asila la planta hembra en la zona de cruza y polinízala cubriendo cada rama con la bolsa de polen y agitándola nuevamente. Déjala cubierta por aproximadamente 1 hora y repite el proceso en las demás ramas.

Si vas a crear nuevas cepas en casa, dales seguimiento

¡Etiqueta las plantas! Una vez que polinices las plantas hembras, ponles una etiqueta que diga a qué cepa pertenece, tanto la madre, como aquella de donde obtuviste el polen. No todos los cruces son exitosos y querrás saber cuáles ya has intentado antes, así como los resultados.

Adicionalmente, lleva una bitácora, ya que crear nuevas cepas en casa no es un proceso que se haga en solo unos cuantos días—pueden ser años de intentos y experimentos con una amplia variedad de resultados.