Cómo hacer un microcultivo de cannabis en una torre de computadora

Cómo hacer un microcultivo de cannabis en una torre de computadora

Microcultivo en una torre de computadora

El microcultivo de cannabis en una torre de computadora es una forma discreta y eficiente de cultivar en espacios reducidos. Puedes aprovechar el espacio de una torre vieja para crear un ambiente controlado que favorezca el crecimiento de tus plantas.

El contenido de este artículo:

¿Qué es un microcultivo de cannabis?

Un microcultivo de cannabis se refiere a un cultivo de pequeñas dimensiones, adaptado para espacios muy reducidos, como cajas de cultivo, armarios o, en este caso, una torre de computadora. El objetivo es maximizar la eficiencia del espacio disponible y minimizar el uso de recursos, como luz y agua, mientras se mantienen las condiciones ideales para el desarrollo de las plantas.

En el caso de las torres de computadora, se aprovecha su estructura interna para crear un pequeño entorno controlado. Este método es ideal para cultivadores que buscan discreción y que no tienen acceso a áreas grandes para el cultivo de plantas de cannabis.

Preparación de la torre de computadora

Para empezar, necesitarás una torre de computadora vieja. Retira todos los componentes internos (placa madre, disco duro, etc.) y limpia bien el interior. Luego, deberás hacer algunos ajustes para adaptarla al cultivo.

  1. Forrar el interior: Cubre las paredes internas de la torre con material reflectante, como mylar o papel aluminio. Esto ayudará a maximizar el uso de la luz en el espacio reducido.
  2. Ventilación: Instala ventiladores pequeños en la parte superior y en la parte inferior para permitir la entrada y salida de aire. Es esencial tener una buena circulación para evitar problemas de moho y asegurar un flujo constante de oxígeno.
  3. Iluminación: Elige luces LED pequeñas o luces CFL que no generen mucho calor, ya que el espacio es limitado y las altas temperaturas podrían dañar las plantas. Debes ajustarlas a la distancia adecuada para no quemar las hojas, pero lo suficientemente cerca como para asegurar un buen crecimiento.

¿Qué plantas son ideales para el microcultivo?

No todas las plantas de cannabis son adecuadas para el microcultivo. Es preferible optar por variedades de bajo crecimiento, como las cepas autoflorecientes o índicas, que tienden a ser más compactas. Estas plantas tienen un ciclo de vida corto y no crecen tanto en altura como las sativas, lo que las hace ideales para espacios pequeños.

Además, al utilizar la técnica de “entrenamiento de bajo estrés” (o LST), puedes manipular el crecimiento de las plantas para que se mantengan compactas. Esta técnica consiste en doblar cuidadosamente las ramas para que crezcan en horizontal en lugar de vertical, maximizando el uso del espacio.

Control de la temperatura y humedad

Debido a las dimensiones reducidas, es crucial mantener un control estricto sobre la temperatura y la humedad dentro de la torre de computadora. La temperatura ideal debe estar entre 21°C y 27°C. Para evitar sobrecalentamientos, es recomendable tener un termómetro dentro de la torre para monitorear las condiciones en todo momento.

La humedad también juega un papel importante. Durante las primeras etapas de crecimiento, las plantas de cannabis necesitan niveles más altos de humedad (alrededor del 60-70%). A medida que avanza el ciclo de floración, esta debe disminuir (alrededor del 40-50%) para prevenir problemas de moho.

Sustrato y nutrientes

En cuanto al sustrato, es recomendable utilizar una mezcla que retenga bien el agua, pero que al mismo tiempo tenga un buen drenaje. Los sustratos a base de fibra de coco o perlita son ideales para estos espacios limitados. Asegúrate de no sobrecargar el suelo de nutrientes, ya que en un espacio reducido las plantas pueden reaccionar de manera negativa a los excesos.

Para alimentar las plantas, utiliza fertilizantes específicos para cada fase de crecimiento: nutrientes ricos en nitrógeno durante la fase vegetativa y en fósforo y potasio durante la fase de floración.

El ciclo de luz para el microcultivo

El ciclo de luz también es clave en un microcultivo. Para las cepas autoflorecientes, puedes mantener un ciclo de 18 horas de luz y 6 de oscuridad durante todo el proceso. Sin embargo, si cultivas una cepa fotoperiódica, necesitarás cambiar el ciclo a 12 horas de luz y 12 de oscuridad una vez que la planta esté lista para florecer.

Ventajas del microcultivo en una torre de computadora

El microcultivo en una torre de computadora tiene varias ventajas. La discreción es una de las principales, ya que desde el exterior, nadie podrá imaginar que dentro de la torre se está cultivando cannabis. Además, permite un control riguroso de las condiciones de crecimiento y requiere menos recursos que los cultivos tradicionales.

Otra ventaja es que este tipo de cultivo es altamente personalizable. Puedes ajustar la configuración según tus necesidades, desde la intensidad de la luz hasta el sistema de riego, lo que te brinda una gran flexibilidad.

Desafíos del microcultivo

A pesar de sus ventajas, el microcultivo en una torre de computadora también presenta algunos desafíos. El principal es el espacio limitado, lo que puede restringir el tamaño y la cantidad de plantas que puedes cultivar. Además, al tratarse de un ambiente cerrado, es fundamental asegurarse de que las condiciones de temperatura, humedad y ventilación sean las adecuadas.

Otro desafío es el mantenimiento constante que este tipo de cultivo requiere. Deberás estar atento a los niveles de nutrientes, agua, y luz, y estar preparado para hacer ajustes cuando sea necesario para garantizar que las plantas crezcan saludablemente.

El microcultivo de cannabis en una torre de computadora es una opción ideal para quienes buscan discreción y eficiencia en el uso del espacio. Si bien presenta algunos desafíos, los beneficios de este método de cultivo pueden ser muy gratificantes. Siguiendo los pasos adecuados y eligiendo las cepas correctas, es posible obtener una buena cosecha en un espacio reducido.