Cómo lidiar con una plaga de chinches apestosas

Cómo lidiar con una plaga de chinches apestosas

plaga de chinches apestosas

Todos conocemos a las chinches apestosas, pues solemos encontrárnoslas en nuestras casas una vez que se va el frío invernal. Sin embargo, para los agricultores, éstas representan un peligro por su gusto por las hojas y los tallos—y el cannabis es parte de su dieta. Lo mejor es saber cómo lidiar con una plaga de chinches apestosas.

Qué son las chinches apestosas

Seguramente las llamas por otro nombre. Son bastante comunes en México y aparecen cuando sube la temperatura después del invierno: los bichos “de hojita”.

Las chinches apestosas son insectos pequeños, de espalda ancha y un color verde claro, por lo que suelen camuflarse como hojas pequeñas. Sin embargo, otras variedades tienen colores distintos; desde marrón hasta rojo brillante.

Si alguna vez atrapaste alguna para sacarla de tu casa seguramente sabes por qué se llaman así. Para defenderse, las chinches apestosas despiden un fuerte olor ocre. Éste no representa ningún riesgo para los humanos, fuera de que te apeste la mano un rato, pero es capaz de ahuyentar a otros depredadores.

Cómo lidiar con una plaga de chinches apestosas

Lo primero es retirarles toda fuente de alimento. Evidentemente, no puedes retirar las plantas de tu cultivo. En vez de eso, mantén limpio tu espacio de cultivo, eliminando las hojas caídas y demás material de la planta que ya no sirva.

Son insectos medianos, detectables a simple vista, así que, si te encuentras sólo uno o dos, sólo atraparlos y retíralos. A continuación, revisa que no hayan dejado sus huevecillos. Busca pequeños puntos blancos en las hojas y corta las que encuentres infectadas.

Al agitar las ramas también puede ocasionar que se caigan los huevecillos que no hayas visto. Un baño de agua y jabón ecológico evitará su proliferación. Por último, el aceite de nim es un insecticida natural, efectivo contra una infestación de chinches apestosas y ayuda a prevenir futuras plagas.

Cómo evitarla

Como siempre, el mejor ataque es la defensa y la prevención. Si tienes un cultivo interno, asegúrate de bloquear todos los accesos del exterior e instalar redes y mosquiteros en las ventanas. Las redes también pueden proteger a las plantas de los cultivos externos de insectos de tamaño mediano, como las chinches apestosas.

Por último, siempre es recomendable revisar a las plantas periódicamente—hojas y tallos, sobre todo—para asegurarse que no tengan huevecillos o agujeros que indiquen la presencia de un invitado indeseado.