Productos para el cultivo de cannabis

Productos para el cultivo de cannabis

Sobre todo en los cultivos interiores, existen muchos productos para el cultivo de cannabis. Algunos son indispensables; otros, para usos muy específicos. Aquí explicamos algunos de los más comunes.

Semillas

A excepción de los cultivos de clones, las semillas son de donde provienen todos los cultivos de cannabis. Desgraciadamente, en México y otros lados, todavía no es posible ir a tu tienda de jardinería de confianza a comprar un paquete de semillas de cannabis; pero adquirirlas tampoco es imposible.

¿Es legal comprar semillas de cannabis?

Sin duda, la aceptación del uso lúdico del cannabis va en aumento, por lo que las leyes están cambiando constantemente. Aunque, en tiempos recientes, México ha dado un par de pasos importantes para su total legalización, la compraventa de las semillas del cannabis sigue prohibida.

Pero no te apures, no todo son malas noticias. Sí es legal adquirirlas de países donde la compraventa sea legal. Pueden comprarse en línea y Barney’s Farm, Tramuntana Seeds y Dungeons Vault Genetics son solo algunos de los bancos de semillas que envían a México. Verás que tienen un límite—en peso—de lo que pueden enviar, pero solo unas cuantas semillas son suficientes para cualquier cultivo personal.

Antes de que te aventures en hacer cualquier compra, te recomendamos que revises bien las leyes del lugar donde vives para evitarte cualquier problema.

¿Qué cepa de cannabis compro?

Eso depende totalmente de ti, pero no solo consideres su sabor y/o efectos, ya que también afectan tu cultivo. Algunas cepas son más pequeñas que otras y, por lo tanto, mejores para cultivos internos o externos; algunas—como las índicas—crecen más rápido que otras, como las sativas; otras dan un número diferente de brotes o requieren menos o más cuidados.

Tipo y número de semillas

Recordarás que existen distintos tipos de semillas: feminizadas—que garantizan cultivos de plantas hembra—y autoflorecientes—que florecen por cuenta propia—además de las normales.

Ninguna de estas variantes afecta tu tiempo de cultivo, pero sí la cantidad de semillas que deberías comprar. Aproximadamente ¼ de tus semillas normales no germinarán, morirán o serán machos. Por ello, lo mejor es comprar 4 veces el número de semillas que el número total de plantas que quieres cosechar. Con las semillas feminizadas, esto se reduce a 2 veces: si quieres cosechar 6 plantas, compra 12 semillas.

¿Cuánto cuestan las semillas de cannabis?

Otra vez, todo depende de qué estás comprando. Puedes encontrar las semillas más comunes, a granel, aproximadamente a MXN 75. Esta cantidad aumenta conforme aumente su especialidad; si son genéticamente modificadas (feminizadas) o de alguna cepa en específico. Así, el precio por algunas semillas de cannabis puede alcanzar los MXN 1,000.

Productos para el cultivo de cannabis: máquinas clonadoras

Los clones son una alternativa a las semillas: recortes de otras plantas que echan raíces y crecen como plantas aparte.

Mientras este proceso simplifica algunas de las etapas del cultivo (no es necesario germinar semillas, por ejemplo), los clones son más delicados que las plántulas normales y, por lo tanto, requieren de más cuidados mientras echan raíces. Por ello, quizá sea buena idea invertir en una máquina clonadora.

Esencialmente, las máquinas clonadoras proveen un espacio de cultivo con todo lo necesario para asegurar la supervivencia de los clones. Utilizan un sistema aeropónico. Es decir, los clones crecen con sus raíces expuestas, que son rociadas por una solución de agua con nutrientes a intervalos fijos. Algunas incluso tienen un domo transparente que las protege del exterior al mismo tiempo que permite el suministro de luz.

Hay distintas razones para pensar en invertir en una de estas máquinas, las cuales abarcan desde el uso personal hasta los cultivos de tamaño industrial o de cannabis de alta calidad. Lo que es seguro es que no es equipo para cultivadores principiantes. Se recomienda tener experiencia cultivando cannabis antes de comprar una.

Como probablemente te lo habrás imaginado, no es equipo barato. Es posible que encuentres una máquina clonadora “barata” por poco más de MXN 1,000, pero las más comunes no bajan de los MXN 3,000.

Productos para el cultivo de cannabis: Invernaderos portátiles o tiendas de campaña

Hay muchos productos electrónicos para el cultivo interno de cannabis requieren de muchos aparatos, como luces o ventiladores—entre otros—que pueden reducir el espacio y tienen que estar angulados o apuntando a cierta dirección. Por ello, los invernaderos portátiles—también llamados “tiendas de campaña de cultivo”—son una excelente alternativa a hacerle agujeros a tus paredes.

Vienen en muchos tamaños, desde pequeños, de unos cuantos centímetros cuadrados; hasta espacios enormes con varias divisiones. Además, tienen partes estructurales de las que se pueden colgar los ventiladores o las lámparas, así como accesos para los tubos flexibles para la ventilación. Algunos, incluso, traen ventiladores integrados.

Su color no es accidental tampoco. Unos cubos negros por fuera, suelen tener una superficie reflejante generalmente es plateada (aunque a veces es dorada) en su interior. Esta permite que rebote la luz de las lámparas y alcance la gran mayoría de la superficie de las plantas. Con este simple distintivo, los invernaderos portátiles garantizan cosechas más grandes.

Lámparas

Al igual que otros productos para el cultivo de cannabis, seguramente nunca habías considerado qué tipo de lámpara comprar, o qué foco, hasta que decidiste cultivar cannabis.

Los cultivos exteriores usan el sol; pero en los interiores, las lámparas son indispensables y decidirte por una variedad depende de varias cosas.

Afectan cosas como tu espacio, cuenta de luz y economía personal, así como la temperatura de tu cultivo. Las lámparas HID, por ejemplo, tienen un precio bastante accesible, pero se calientan mucho, lo cual no solo afecta a tus plantas, sino a tu cuenta de luz a finales del mes.

Por otro lado, las lámparas LED tienen focos pequeños, usan poca energía y no calientan tanto el ambiente. Parecen perfectas hasta que intentas comprar una: son bastante caras.

Todos conocemos los focos fluorescentes. Son generalmente baratos, pero, al ser tubos largos, ocupan bastante espacio, sobre todo porque emiten la menor cantidad de luz. Una sola lámpara necesita varios focos, por lo que pueden llegar a ser unos armatostes bastante grandes.