¿Qué son las semillas autoflorecientes?
Así como nuestras bicicletas tienen “rueditas” cuando estamos aprendiendo a andar en bicicleta, las semillas autoflorecientes son una buena opción para el cultivador principiante al automatizar partes del cultivo. Pero, como todo, también tienen sus desventajas.
¿Qué son las semillas autoflorecientes?
Primero que nada, recordemos que, lo que hace florecer al cannabis, es cuando detectan que están recibiendo menos luz que antes. En los cultivos externos esto pasa naturalmente con las estaciones y los días más cortos; en los internos, el cultivador controla este evento y, con ello, cuándo florece su cannabis.
Sin embargo, las semillas autoflorecientes—con el nombre científico de Cannabis ruderalis—, son distintas. Aprendieron a florecer cuando alcanzan cierta edad y sin importarles la luz (por esta razón, también se les conoce como “semillas automáticas”). Por lo tanto, el cultivador no tiene por qué preocuparse por reducir las horas de luz para que florezcan.
Algunas desventajas de las semillas autoflorecientes
Como ya lo ves, no hay nada totalmente bueno en esta vida y hasta las semillas automáticas de cannabis tienen desventajas. La más obvia es que te quita control. Muchos cultivadores se deciden por los cultivos internos precisamente por el control que les otorga, el cual no pueden tener con semillas autoflorecientes.
Hay otra desventaja menos obvia. La marihuana que proviene de semillas autoflorecientes es famosa por ser menos potente que los otros tipos, además de que no producen tantas flores. Sin embargo, recientemente se han estado creando cepas de semillas automáticas más potentes.
Cuidados especiales
Aunque sean “automáticas”, estas plantas también necesitan de algunos cuidados especiales por la velocidad con la que crecen. Cuida de regarlas tú mismo y mantenlas alejadas de la lluvia, ya que puede caerles mal. Si tienes un cultivo exterior, cúbrelas con algo.
Ten en cuenta que crecen muy rápido, así que debes estar alerta, pues su estado vegetativo es corto. Mídelo desde que las plantas desarrollen tres nudos hasta que salgan las primeras flores para darles los cuidados necesarios. Tampoco necesitan muchos nutrientes para crecer, pero sí para florecer—infórmate bien.
Así como nuestras bicicletas tienen “rueditas” cuando estamos aprendiendo a andar en bicicleta, las semillas autoflorecientes son una buena opción para el cultivador principiante al automatizar partes del cultivo. Pero, como todo, también tienen sus desventajas.