¿Cómo afecta el cannabis al sistema inmunológico?

¿Cómo afecta el cannabis al sistema inmunológico?

Con tantos descubrimientos que se han hecho desde su legalización en tantos lados en años recientes, una pregunta sigue en el aire: ¿cómo afecta el cannabis al sistema inmunológico? No hay duda de que tiene un impacto. Sin embargo, como suele ocurrir en estos casos, la respuesta no es tan sencilla, ya que hacen falta muchos estudios. Aquí está lo que sabemos hasta ahora.

¿Qué es el sistema inmunológico?

El sistema inmunológico está compuesto de células con funciones muy específicas, químicos y hasta órganos: los glóbulos blancos, el sistema del complemento, los anticuerpos, el sistema linfático, el bazo, el timo y la médula. En combinación, todos se encargan de proteger a nuestro cuerpo de enfermedades e infecciones y mantener su funcionamiento en condiciones óptimas.

De todos los componentes listados arriba, los glóbulos blancos quizá sean uno de los más importantes, pues son una especie de “disco duro”. Es decir, almacenan la información de aquellos bichos de los que se han desecho anteriormente. Esto les permite, cuando vuelven a aparecer, responder rápida y eficazmente.

Además, también se encargan de detectar y destruir aquellas células de nuestro cuerpo que no funcionen del todo bien o muestren comportamientos extraños. De éstas, el ejemplo más obvio son las células cancerígenas.

El sistema inmunológico y el endocannabinoide

Al encargarse de interpretar información y responder, el sistema endocannabinoide está muy ligado al sistema inmunológico. Con sus respuestas regulan, desde inflamaciones que causa nuestro sistema inmunológico, hasta la función de sus células.

Si has leído este blog con anterioridad, o cualquier otro dedicado al cannabis, seguramente has oído hablar de las partes del sistema endocannabinoide que regula dichas respuestas: los receptores CB1 y CB2. Éstos son directamente afectados por los cannabinoides que consumimos. Por lo tanto, el sistema inmunológico también se ve afectado por el consumo de THC y CBD, principalmente.

Por ejemplo, se cree que el CBD es capaz de suprimir algunas inflamaciones producidas por el sistema inmunológico, así como provocar la muerte de algunas de sus células. Aunque esto se escucha muy dramático, no tiene por qué serlo. La muerte de las células del sistema inmunológico es perfectamente normal bajo ciertas circunstancias, especialmente en enfermedades autoinmunes.

El THC también parece ser capaz de reducir las inflamaciones, además de alterar la función de las células del sistema inmunológico.

¿Cómo afecta el cannabis al sistema inmunológico?

Los efectos del sistema inmunológico se clasifican principalmente en dos categorías:

·  Inmunomodulación. Es cuando agentes externos cambian la respuesta del sistema inmunológico, activándolo o debilitándolo.

·  Inmunosupresión. Es cuando disminuye la respuesta de las células del sistema inmunológico. Esto puede ser a causa de una enfermedad o condición, así como una acción deliberada, por medio de fármacos y/o tratamientos.

El cannabis puede disminuir las reacciones del sistema inmunológico. En ocasiones puede ser necesario causar una inmunosupresión para aliviar al paciente, como cuando el sistema inmunológico se sale de control. En otros casos, la inmunosupresión puede dañar al paciente; todo depende de qué se esté tratando de tratar o curar.

Pero esa no es la única manera como el cannabis afecta al sistema inmunológico. Algunos estudios han vinculado tanto al CBD como al THC con efectos inmunomoduladores en el sistema linfático intestinal. Ahí se encuentran almacenadas el mayor número de las células del sistema inmunológico; más de la mitad de los linfocitos del cuerpo. Los linfocitos son glóbulos blancos encargados de destruir cualquier sustancia o célula intrusa.

Adicionalmente, las células del sistema linfático intestinal parecen almacenar grandes concentraciones de cannabinoides. Aproximadamente 250 más que en el plasma cuando se trata de CBD; 100 veces más que en el plasma cuando es THC.

Tales concentraciones pueden inhibir las respuestas en forma de inflamación del sistema inmunológico, lo cual puede ser tanto una ventaja, como una desventaja.

Ventajas y desventajas de los efectos del cannabis en el sistema inmunológico

Como mencionamos antes, suprimir las funciones del sistema inmunológico puede ser bueno en ciertos casos, como en las enfermedades autoinmunes; y malo, en otros.

Es posible que quienes consumen cannabis regularmente tengan un conteo menor de las células que promueven la inflamación y mayor de aquellas que la suprimen. Es decir, el cannabis sí podría reprimir las respuestas del sistema inmunológico.

Menos inflamación podría ser una señal de que la funcionalidad de los glóbulos blancos ha disminuido. Evidentemente, si los glóbulos blancos no funcionan tan bien, no son tan efectivos al defender a su portador de cosas como infecciones. Además, el cannabis ya ha sido vinculado a una reducción de las células que disminuyen la difusión de tumores o infecciones.

Esto, y otras señales con las que se ha vinculado al cannabis, ha llevado a pensar que quienes consumen cannabis regularmente no solo son más susceptibles a contraer infecciones. También, son menos efectivos en detener su progresión.

El cannabis, el cáncer y el SIDA

Aunque se ha comprobado su efectividad al combatir los síntomas de la quimioterapia, como las náuseas, también hay que tener en cuenta el efecto del cannabis en el sistema inmunológico. Si es cierto que disminuye la efectividad de las células que combaten infecciones, podría tener un impacto significativo en los pacientes de este tipo de tratamientos.

En el caso del SIDA parece ocurrir lo opuesto. Se ha ligado al consumo de cannabis con el aumento de células CD4, que suelen indicar la resistencia del sistema inmunológico. Algo muy necesario para combatir los efectos del virus del VIH.

Como siempre, para poder sacar conclusiones más sólidas se deben hacer más estudios. Poco a poco se va descubriendo el papel que juega el cannabis en medicina—tanto para bien como para mal.