La medicina que cura la sobredosis de cannabis

La medicina que cura la sobredosis de cannabis

Aunque están lejos de ser mortales, las sobredosis de cannabis no pueden ignorarse. Generalmente se tratan con tiempo; pero ahora, sobre todo porque su legalización ha ido a la alza, se está desarrollando una medicina que cura la sobredosis de cannabis en solo minutos. Algo especialmente útil para aquellas que son accidentales.

Las sobredosis accidentales

En particular, los niños son muy vulnerables a sufrir una sobredosis accidental cuando confunden—por ejemplo—medicamentos por dulces. En el caso del cannabis, el riesgo es mayor, pues muchos productos son dulces, como las gomitas o paletas; galletas o chocolates.

Afortunadamente, las sobredosis de cannabis son mucho menos serias que las de otras sustancias o medicamentos y es extremadamente raro que ocasionen la muerte. De todos modos, deben ser tratadas, aunque solo sea por aliviar aquellos efectos secundarios tan desagradables.

Generalmente, el tratamiento es solo esperar a que pase. Sin embargo, es posible que pronto exista una medicina capaz de curar la sobredosis de cannabis.

¿Qué ocurre durante una sobredosis de cannabis?

Al consumir cannabis, los cannabinoides causan sus efectos al actuar sobre los receptores CB1 y CB2 de nuestro sistema endocannabinoide, que regula nuestras funciones más básicas. En una sobredosis, estos se sobrecargan y alteran cosas como nuestra percepción, lo cual nos puede hacer pasar un mal rato; causar ansiedad o hasta ataques de pánico.

Dependiendo del método de consumo, el tiempo en el que desaparecen estos síntomas es muy variable; a veces, ocurre en solo minutos o una hora; otras más, en varias horas.

La medicina que cura la sobredosis de cannabis

Aunque todavía se encuentra en pruebas, un medicamento llamado ANEB-001 ha mostrado eficacia para tratar la intoxicación aguda de cannabis de un modo muy simple. Bloquea temporalmente los receptores CB1, que se encuentran en el cerebro e interactúan principalmente con el THC.

A lo largo de varias pruebas en los Países Bajos, con distintos grupos y dosis, los resultados han sido prometedores, reduciendo los síntomas consistentemente en aquellos que consumieron cannabis a diferencia de aquellos que consumieron un placebo.

La idea, una vez que se apruebe su uso, es abastecer a las salas de urgencias de los hospitales y tratar a los consumidores accidentales en solo unos cuantos minutos.