Estudio: El CBD podría tratar la adicción al crack
Varios estudios sobre el cannabis han sugerido su potencial para el tratamiento de adicciones. Ahora, uno recientemente publicado en Brasil se enfoca en el CBD para tratar la adicción al crack. Aunque los resultados indican que no es más efectivo que el tratamiento convencional, sí tiene menos efectos secundarios, lo que podría ser una razón por la cual muchos lo prefieran.
El CBD podría tratar la adicción al crack
Los resultados de este estudio sugieren que el CBD podría ser útil en el tratamiento de la adicción al crack. Participaron 22 autores de diversas instituciones brasileñas, tanto académicas como gubernamentales, como la Universidad de Brasilia, la Secretaría de Salud e Instituto Forense del Distrito Federal de Brasil y la Universidad Federal de São Paulo.
Inicialmente, el estudio contó con 90 participantes, de entre 18 y 65 años, aunque solo 25 completaron el estudio. Todos eran consumidores habituales de crack, lo que significa que lo habían consumido al menos 20 veces en el mes anterior y tenían la intención de tratar su adicción. Algunos también consumían otras sustancias.
El estudio fue ciego, es decir, los participantes no sabían si formaban parte del grupo control o del experimental hasta después de completarlo.
¿En qué consistió el estudio?
El grupo experimental recibió CBD, mientras que el grupo control recibió los medicamentos convencionales para tratar la adicción, como fluoxetina, ácido valproico y clonazepam. Los grupos que completaron el estudio constaban de 15 y 10 participantes, respectivamente.
Durante el proceso, se observaron los efectos de los tratamientos, no solo en términos de efectividad, sino también en cuanto a los efectos secundarios. Estos últimos suelen ser tan graves en el tratamiento convencional que muchos pacientes deciden abandonarlo.
Entonces, ¿podría el CBD tratar la adicción al crack?
Aunque el CBD no mostró diferencias significativas en cuanto a eficacia en comparación con el tratamiento convencional, sí presentó menos efectos secundarios. Por ejemplo, no provocó la pérdida de apetito ni las náuseas comunes en los pacientes que reciben el tratamiento convencional.
El grupo tratado con CBD también experimentó menos incidencias de diarrea o estreñimiento, mareos, problemas de memoria, dificultad para concentrarse, temblores, congestión nasal o ataxia.
Aunque un estudio de este tamaño no constituye evidencia concluyente de que el CBD sea un remedio para las adicciones, sí abre la puerta a pruebas más amplias con sujetos humanos. Es posible que en el futuro se realicen estudios más extensos que no solo involucren al CBD, sino también a otros cannabinoides y compuestos del cannabis para tratar la adicción al crack y a otros estupefacientes.