Argentina explota el mercado de cannabis
En años recientes, la industria de la marihuana ha tenido un impulso importante en Sudamérica. Hoy, Argentina explota el mercado de cannabis, el cual, se cree, beneficiará al país más allá de solo facilitar el consumo. Podría, incluso, impulsar la economía nacional.
Argentina explota el mercado de cannabis
El pasado 25 de enero, el gobierno argentino lanzó un grupo de trabajo que, con el tiempo, se convertirá en una nueva agencia gubernamental. Ésta estará encargada de regularizar y promover a la industria del cannabis a nivel nacional.
Según la visión de muchos, la industria del cannabis es demasiado grande e importante como para dejarla pasar o dejar que crezca por cuenta propia. “Tiene 25,000 aplicaciones distintas”, señaló Sergio Massa, ministro de Economía. “Nos va a permitir agregar valor en […] una innumerable cantidad de sectores económicos en la Argentina y el mundo”, recalcó.
Lo primero que hará esta potencial nueva agencia será coordinarse con las provincias argentinas, así como el sector industrial, para empezar a regular los programas futuros.
¿Qué se espera lograr al explotar el mercado de cannabis?
Explotar el creciente mercado de cannabis en Argentina no es solamente para beneficiar a los consumidores, sino a todo el país Sudamericano. Francisco Echarren, líder del grupo de trabajo recién formado, especula que podría generar millares de nuevos empleos.
Además, la economía nacional se vería beneficiada al desarrollar nuevos productos; no solo para consumo argentino, sino para exportarlos. Y, finalmente, impulsará el desarrollo de nuevas tecnologías.
¿El cannabis es legal en Argentina?
En 2013, Uruguay se convirtió en el primer país Sudamericano en legalizar el consumo de la marihuana, así como su cultivo y su venta. Quizá gracias a los cambios de su vecino, 4 años después, en 2017, Argentina legalizó su uso medicinal. Con ello, se abrió la oportunidad de cultivar cannabis para comenzar a estudiarlo localmente.
Tres años después, en 2020, finalmente se legalizaron los cultivos personales para su uso medicinal, así como la venta de productos derivados del cannabis por parte de las farmacias. Aquellos pacientes con receta médica de productos de cannabis también verían sus gastos cubiertos por las aseguradoras.
