Estudio vincula al cannabis con menor obesidad
Sabemos que el cannabis tiene un sinfín de aplicaciones médicas. Un estudio reciente lo vincula con menor obesidad, por lo menos en un estado de Estados Unidos. De ser cierto, podrían desarrollarse medicamentos y tratamientos para tratar una de las comorbilidades que más afectan a la raza humana.
Estudio vincula cannabis con menor obesidad
Con la legalización se han abierto nuevos campos para observar y estudiar al cannabis. Ahora, un estudio llevado a cabo por la Universidad Estatal de Dakota del Norte (North Dakota State University) lo vincula con una reducción en el índice de obesidad. Esto, en el estado de Washington, donde se dio seguimiento a los índices de obesidad, de 2002 a 2018. Es decir, antes y después de que se legalizara el consumo recreacional de cannabis, que ocurrió en 2012.
Los autores concluyeron que, entre más estados norteamericanos se unan a la legalización del cannabis, los nuevos descubrimientos podrán ir dando forma a legislaciones de drogas más modernas. Esto, tanto en el campo de la medicina como en el recreacional.
El cannabis como supresor del apetito
Hay cannabis para todo. Uno de sus efectos secundarios más famosos, más que reducir los índices de obesidad, podría aumentarlos. Y es que el antojo—los famosos munchies—no es solo comer cualquier cosa, sino carbohidratos: comida que engorda. Sin embargo, otros tipos de cannabis tienen efectos diferentes.
Existen cepas que inhiben el apetito por los elementos que contienen, como el cannabinoide CBN o el terpeno humuleno. Incluso se han llegado a usar en dietas para bajar de peso.
¿Cómo podría llevar el cannabis a menor obesidad?
Estados Unidos es el país de todo el continente americano donde más se consume cannabis. No es su único título; todavía es el país con el mayor índice de obesidad (seguido de cerca por México). Los autores del estudio dicen que la reciente legalización de la marihuana en distintos estados puede ayudar a comprender mejor la relación entre ella y la salud de la vida cotidiana de los individuos.
Si el cannabis, en efecto, sirve como supresor del hambre, con la eliminación de las restricciones podrían desarrollarse medicamentos y tratamientos para tratar una de las mayores comorbilidades del mundo.
