¿Cómo se convierte el cannabis en CBD?
El cannabidiol, mejor conocido como CBD se ha vuelto bastante popular y se ha convertido en una industria multimillonaria, pero ¿Cómo se crea el CBD?
Existen 3 métodos principales para extraer CBD, con un grado alimenticio (como el del aceite de oliva), con disolventes líquidos, o con extracción con CO₂ supercrítico. El método industrial más común es la extracción con disolvente líquido.
La Extracción con aceite es uno de los métodos más sencillos y es muy popular entre los productores caseros. Este proceso inicia con el uso del calor para descarboxilar la materia prima vegetal y activar los cannabinoides, el siguiente paso es agregar aceite de oliva al cannabis, calentando la mezcla a 100 °C durante 1 o dos horas en total, lo que provoca que el aceite de oliva se evapore, dejando un aceite de CBD altamente concentrado. Este método se ha vuelto bastante popular, ya que es muy económico y seguro de ejecutar, además de que no requiere un equipo demasiado especial por lo que se pueden hacer extracciones caseras.
La Extracción con disolvente líquido suele realizarse con etanol, propano o butano, en donde la materia vegetal se hierve con uno de estos disolventes para extraer los compuestos deseados. Esta solución se filtra y el disolvente restante se purga por calor/vacío dejando un rico concentrado de CBD. Es un proceso bastante simple que tampoco requiere algo excesivamente especializado.
La Extracción con CO₂, supercrítica es el método de extracción comúnmente usado en las farmacéuticas, ya que se considera que produce el aceite de la mejor calidad. Este método es un método muy popular, sobre todo en la cosmética y la farmacéutica, en donde a la presión y temperaturas críticas, el C=2 adquiere un estado entre líquido y gas, lo cual le permite exhibir los rasgos de ambos estados, en donde el CO₂ es utilizado como un “solvente verde” para extraer CBD. El CO₂ debe alcanzar la precisión y un conocimiento especializado, ya que cada compuesto se aísla a una temperatura diferente.