Cómo hacer hachís casero
El hachís es un extracto de cannabis que se puede hacer de manera industrial; pero también en casa con solo un par de herramientas que se consiguen fácilmente. Incluso existen varios métodos. Sigue leyendo para aprender cómo hacer hachís casero.
¿Qué es el hachís?
También llamado hash (sobre todo en inglés) o hashish, el hachís son los tricomas que se desprenden de la planta del cannabis que contienen terpenos y cannabinoides. Es un polvo fino que comúnmente se compacta en una variedad de formas—ladrillos y pelotitas, entre otras.
Se puede consumir de diversas maneras; fumarlo por sí solo o como un complemento para otros medios de consumo, espolvoreado en un porro o pipa. Se puede evaporar e inhalar en el dabbing o usar como ingrediente en comestibles.
Hay muchos métodos para extraer hachís. Como otros extractos, algunos utilizan químicos y solventes para fabricar productos como el hachís de etanol, el aceite de hachís de propano, o PHO, entre otros. Por otro lado, también existen maneras que no involucran químicos—solamente paciencia y esmero.
Es fácil saber qué tan refinado es el producto final. Entre más claro su tono café, más refinado. Sin embargo, la calidad del hachís ultimadamente depende de la calidad del cannabis de donde provenga—el producto final nunca tendrá mayor calidad que la flor que lo creó.
Como se puede usar cualquier material de la planta que contenga polen—hojas y ramas, además de la flor—, al fabricar hachís aprovechas toda la planta de cannabis después de cosecharla, en vez de solo la flor.
¿Qué son las Bubble Bags y los cedazos?
Para extraer hachís en casa se necesitan un par de herramientas especializadas. En el caso de los métodos que nombraremos a continuación, las Bubble Bags y los cedazos.
Las primeras son una serie de bolsas de malla cuyas micras son progresivamente más pequeñas. Es decir, cada vez más finas. Se colocan una sobre otra (más detalles abajo) para colar el cannabis hasta conseguir la consistencia deseada.
Algo similar ocurre con los cedazos. Si alguna vez has manipulado cemento o harina de cocina, seguramente has visto uno. Son una malla extendida a través de un marco, ya sea de madera o metal. Similar a las Bubble Bags, los cedazos para hacer hachís también son progresivamente más finos.
Finalmente, también existen prensas para comprimir el hachís en ladrillos, aunque ésta no es absolutamente necesaria.
Cómo hacer hachís casero con Bubble Bags
También llamado hachís congelado, este método consiste en—evidentemente—congelar el cannabis en agua y hielos y revolverlo por un tiempo. Así se desprenden los tricomas más fácilmente. Luego se cuela y se repite el proceso.
Aunque se puede utilizar cualquier material de la planta como hojas y ramas, las primeras pueden hacerles agujeros a las bolsas, así que se recomienda evitarlas.
Además de las Bubble Bags necesitas dos cubetas de 20 litros; algo para revolver, como un palo o vara larga; y una bolsa de hielo.
Receta
Congela las flores y el resto de material de la planta en una bolsa ziploc dentro del congelador durante la noche.
Llena el fondo de una de las cubetas con hielo, haciendo una capa; coloca el material de la planta que congelaste la noche anterior y cúbrelo con otra capa de hielo. Vierte agua dentro de la cubeta hasta cubrir la segunda capa de hielo. Déjalo enfriar por unos 20 minutos.
Prepara las Bubble Bags en la otra cubeta—la red más fina hasta abajo; debe ser la última en colar.
Con la vara o palo, revuelve el cannabis en el agua con hielos para que se desprendan los tricomas y comienza a colar. Vierte el agua a través de la red más gruesa. Golpea un poco el material de la planta que se quede en la red y repite el proceso con la bolsa siguiente.
Al llegar a la bolsa más fina, recoge el hachís con una cuchara y ponlo a secar en una superficie plana por un par de horas. Forma pelotitas o un ladrillo y déjalo secar adicionalmente por uno o dos días.
Puedes recolectar el hachís que te sobre de las últimas dos o tres bolsas; pero te recomendamos que no los mezcles. Verás que tienen un color más oscuro—o sea, está menos refinado.
Cómo hacer hachís casero con cedazos
El proceso de hacer hachís con cedazos es muy similar al anterior, con las Bubble Bags, con la enorme diferencia que este proceso es en seco. Solamente necesitas tus cedazos (también llamados tamizadores y que puedes fabricar tú mismo o comprarlos) y un objeto plano, como una tarjeta de crédito o credencial, de plástico o metal.
Receta
Al igual que el proceso de arriba, puedes congelar el cannabis la noche anterior para que los tricomas se desprendan más fácilmente, aunque no es absolutamente necesario.
Acomoda los cedazos de grueso a fino encima de una superficie plana, como una mesa. Golpea ligeramente y soba la flor y material de la planta de la primera capa hasta que veas que los tricomas dejen de desprenderse.
Verás una capa de “polvo” en la capa siguiente. De aquí en adelante, manipúlalo con la tarjeta plástica. Mueve el hachís de un lado al otro de la malla y repite el proceso con los demás cedazos hasta llegar al último.
Comprime el hachís resultante en un ladrillo usando una hidráulica o en pelotitas, con las manos. Al igual que con el proceso anterior, revisa el penúltimo y antepenúltimo cedazo y júntalos por separado.
Se puede hacer hachís casero al cultivar cannabis
Cultivar cannabis es un proceso extremadamente pegajoso. Ese pegoste que se queda en las manos tras manipularlo al deshojarlo es resina—compuesta de tricomas. Así que, una vez que termines de poner las flores a secar, raspa la resina de tus manos y forma pequeñas pelotitas. Estas charas se pueden fumar, aunque no estarán tan refinadas como el hachís que ha pasado por varias coladeras.
