¿Cuál es la diferencia entre extractos y concentrados?

¿Cuál es la diferencia entre extractos y concentrados?

La diferencia entre extractos y concentrados

Los extractos y los concentrados de cannabis se obtienen mediante procesos de extracción que aíslan los compuestos activos de la planta. La diferencia principal radica en que los extractos contienen una variedad de compuestos, mientras que los concentrados se enfocan en uno solo.

Este artículo contiene información sobre:

Introducción a los extractos y concentrados de cannabis

El cannabis ofrece una amplia gama de productos derivados, entre los que destacan los extractos y los concentrados. Ambos se obtienen al separar los compuestos activos de la planta, pero presentan diferencias significativas en su composición y uso.

Métodos de extracción: industriales y caseros

La extracción de compuestos del cannabis puede realizarse mediante métodos tanto industriales como caseros. Los métodos industriales suelen emplear solventes como butano o propano en un sistema de circuito cerrado para separar los tricomas del material vegetal. Requieren equipos especializados y deben ser aplicados por expertos debido a los riesgos asociados al uso de solventes inflamables. Los métodos caseros, por otro lado, son más seguros. El uso de prensas de calor para obtener rosin o la recolección manual de kief mediante tamices finos.

Diferencias clave entre extractos y concentrados

La principal diferencia entre los extractos y los concentrados radica en su composición. Los extractos contienen una variedad de compuestos, incluyendo cannabinoides, terpenos y flavonoides, que se obtienen directamente de los tricomas de la planta. En cambio, los concentrados se refinan aún más para aislar un solo compuesto; un cannabinoide específico, como el THC o el CBD. Gracias a este refinamiento adicional, los concentrados suelen ser más potentes y deben elaborarse mediante procesos industriales.

Aplicaciones y formas de consumo

Extractos y concentrados se consumen en contextos tanto recreativos como medicinales. Como contienen una variedad de compuestos, los extractos pueden ofrecer un efecto más equilibrado en productos como comestibles, tinturas y tópicos. Los concentrados, con su alta potencia y pureza, permiten una dosificación precisa, por lo que suelen usarse en el tratamiento de dolores crónicos o náuseas inducidas por quimioterapia. Las formas de consumo incluyen la vaporización, el dabbing y la incorporación en alimentos o productos tópicos.

Seguridad y calidad

Es fundamental tener en cuenta tanto calidad como seguridad cuando se utilizan extractos y concentrados de cannabis. Los productos obtenidos mediante métodos industriales deben ser analizados para detectar posibles contaminantes, como los pesticidas o residuos de solventes. El consumo de productos contaminados pueden poner en riesgo la salud por cosas como la inhalación de sustancias nocivas. Por ello, es recomendable adquirir estos productos en establecimientos regulados y verificar que cuenten con certificaciones de calidad.