Cómo utilizar un microscopio para cultivar cannabis
Utilizar un microscopio para cultivar cannabis puede asegurar un cultivo exitoso de flores sanas, robustas y resinosas. Con los avances tecnológicos actuales, ya no es necesario utilizar los pesados y delicados instrumentos que se usaban en la secundaria. Hoy en día, existen microscopios portátiles capaces de proyectar imágenes en la pantalla de cualquier teléfono.
¿Por qué utilizar un microscopio para cultivar cannabis?
Seguramente no necesitas que te expliquemos para qué se utilizan los microscopios; incluso aprendimos a usarlos en la escuela. Cuando éramos niños, nos asomamos por primera vez a través de sus lentes para descubrir el mundo microscópico. Sin embargo, una vez que terminamos la primaria o la secundaria, rara vez volvemos a usarlos.
Los vemos como herramientas destinadas únicamente a los laboratorios, por lo que la simple sugerencia de comprar uno y usarlo en nuestros cultivos de cannabis puede parecer intimidante. Sin embargo, los microscopios pueden resultar extremadamente útiles en el arte de cosechar cannabis.
El cannabis florece cuando hay un cambio en el ciclo de luz. En el cultivo exterior, esto ocurre naturalmente por la luz solar; sin embargo, en el cultivo interior, el momento exacto depende completamente del agricultor. Un microscopio ayuda a determinar con mayor precisión el momento exacto en el cual modificar la cantidad de luz que reciben las plantas, garantizando así flores más grandes y jugosas.
También son útiles para preservar la salud de las plantas. Cuando aparecen los síntomas de enfermedades y plagas que a simple vista no se pueden identificar, el problema suele ser significativo y difícil de remediar. Con un microscopio se pueden notar dichos síntomas mucho más temprano, agilizando el tratamiento.
Finalmente, un microscopio permite observar de cerca el sustrato y los tricomas para garantizar que las plantas estén creciendo sanas y fuertes.
Cómo utilizar un microscopio para cultivar cannabis
Utilizar un microscopio en el cultivo de cannabis ayuda a detectar muchos detalles del ciclo de crecimiento que no son visibles a simple vista.
Los tricomas bajo el microscopio
A pesar de su diminuto tamaño, los tricomas son quizás la parte más esencial de la anatomía del cannabis cuando nos referimos a su cosecha. Son unas pequeñas estructuras en las hojas y flores que segregan una sustancia muy viscosa y pegajosa, donde se encuentran los cannabinoides y los terpenos. Estos compuestos son responsables de los efectos psicotrópicos o no, así como de la variedad de aromas y sabores del cannabis.
Pero la función de los tricomas va más allá. Su aspecto ayuda a determinar con precisión en qué etapa del cultivo se encuentra la planta, y si es el momento adecuado para cosecharla.
Estructuralmente, los tricomas son pequeñas columnas coronadas por un bulbo, parecidos a los hongos. Al principio, cuando son jóvenes, son transparentes y su contenido de cannabinoides y terpenos es reducido.
Con el tiempo, su apariencia cambia. A medida que producen una mayor cantidad de cannabinoides, se vuelven más opacos hasta alcanzar un aspecto lechoso; también adquieren un olor más intenso. Luego, los compuestos de los tricomas se degradan y su tono blanco se torna gradualmente amarillo y, después, ámbar.
El momento ideal para cosechar el cannabis depende del producto que el agricultor esté buscando, pero en todos los casos, un microscopio puede garantizar una calidad óptima. Los efectos de los cannabinoides serán más intensos cuando aproximadamente el 70% de los tricomas estén en la etapa lechosa. Al dejarlos tornarse de color ámbar, el contenido de THC disminuye y aumenta el de CBN.
Las plagas bajo el microscopio
Algunas plagas consisten en insectos extremadamente pequeños. Los huevecillos o colonias son síntomas inequívocos de su presencia, pero no siempre son visibles a simple vista.
Revisar las hojas periódicamente con un microscopio ayuda a detectarlos y tomar medidas inmediatas. Si se les permite crecer, las plagas pueden convertirse en un problema extremadamente molesto que, a veces, no tiene solución. Incluso algunas son capaces de arruinar por completo la cosecha.
Las enfermedades bajo el microscopio
Los síntomas que se detectan con el microscopio también pueden ser de diversas enfermedades que ponen en peligro la integridad de un cultivo de cannabis. Estas enfermedades suelen manifestarse como podredumbre en las hojas o en las mismas flores. Al igual que con las plagas, una detección temprana significa un tratamiento adecuado.
El sustrato bajo el microscopio
No toda presencia de seres vivos perjudica el desarrollo del cannabis. Algunos, que se pueden observar en el sustrato, son necesarios para su crecimiento saludable y para que produzca flores robustas y resinosas. Un microscopio es esencial para asegurarse de que los microbios y bacterias que viven alrededor de las raíces sean los adecuados para garantizarlo.
Tipos de microscopios
Si tienes cierta edad, es probable que estés imaginando un solo tipo de microscopio, aquel que usábamos con placas de vidrio para nuestras observaciones. Te alegrará saber que en la actualidad existen microscopios más pequeños, prácticos y fáciles de usar.
No es necesario observar las células de la planta. Los microscopios digitales incluso pueden ser portátiles y tener un conector USB para observar a través de la pantalla de cualquier teléfono celular. Algunos de estos dispositivos incluso tienen aumentos de 200x.
Los microscopios ópticos compuestos son similares a los que usábamos en la escuela. Son más costosos, pero excelentes para observar el sustrato, las bacterias y los hongos que han tomado residencia ahí.
Finalmente, los microscopios electrónicos pueden alcanzar aumentos de hasta 500,000x, ya que no utilizan luz para generar imágenes, sino electrones. Sin embargo, como podrás imaginar, son extremadamente caros.
En realidad, la mayoría de los agricultores no necesitan más que un microscopio digital de precio accesible para garantizar un cultivo exitoso; incluso hay quienes utilizan una simple lupa. Te recomendamos invertir en un microscopio costoso solo si estás interesado en la composición o estructura celular de las plantas.