Tipos de cannabis para agricultores principiantes
La decisión de embarcarse en el cultivo propio de cannabis suele ser un desafío, ya que implica considerar numerosos factores. Aunque el cannabis es una planta resistente y de crecimiento relativamente sencillo, existen ciertos tipos más adecuados para agricultores principiantes. Se buscan plantas resistentes, de tamaño adecuado y que florezcan con relativa facilidad. Estas variedades permiten al agricultor adquirir la experiencia necesaria para posteriormente abordar cepas que requieran cuidados más específicos e incluso crear sus propias variantes.
¿Es complicado cultivar cannabis?
La complejidad depende de la perspectiva sobre la palabra “complicado”. En cierto sentido, el cultivo de cualquier planta no es sencillo, especialmente aquellas de las que se espera produzcan frutos, como es el caso del cannabis, con sus cogollos y flores. Desde el momento en que las semillas se siembran en la tierra o en el sustrato elegido, requieren cuidados diarios.
El tipo de cultivo, ya sea en exterior o interior, conlleva distintas responsabilidades para el agricultor. Por ejemplo, la luz es proporcionada por la naturaleza en el cultivo exterior, mientras que en el interior, el agricultor debe simular el ciclo solar, determinante para el momento en que la planta entra en floración.
Además, las plantas son propensas a ser atacadas por plagas o enfermedades y, al no poder cuidarse por sí mismas, dependen del agricultor para ser tratadas y asegurar así su crecimiento y desarrollo continuo.
En el caso específico del cannabis, el agricultor también debe suministrar diversos nutrientes a lo largo del crecimiento de la planta. Esto garantiza una cosecha óptima y de mayor tamaño cuando llegue el momento de la recolección.
En resumen, se trata de una relación simbiótica que, si bien no es sencilla, puede ser cultivada y mejorada por cualquier persona a medida que adquiere experiencia con la práctica y el paso del tiempo.
Tipos de cannabis para agricultores principiantes
El proceso de cultivar cannabis es extenso y requiere mucha paciencia, así como inversiones que pueden resultar significativas. Por ende, los agricultores novatos deberían comenzar de manera gradual, sabiendo que sus primeros intentos no darán como resultado una cepa que rompa el mercado. Es más provechoso aprender gradualmente de los errores y dedicar tiempo, esfuerzo y dinero en las áreas que más lo necesiten. Los mejores tipos de cannabis para agricultores principiantes deben tener las siguientes características.
Inversión económica
El primer aspecto a considerar es el aspecto económico. Como se mencionó previamente, el costo para cosechar cannabis puede ser elevado, especialmente en el caso de cultivos interiores, lo cual incluye el equipamiento y el valor de las semillas, que varía según la calidad y rareza de las cepas.
Los agricultores novatos deberían comenzar con tipos de cannabis más económicos y considerar invertir más en semillas una vez adquieran experiencia. Comprar semillas económicas no implica necesariamente adquirir semillas de baja calidad.
Tiempo
La inversión de tiempo es otro aspecto fundamental en el cultivo de cannabis. Este recurso, en ocasiones más valioso que el dinero, es necesario para los adultos, principalmente para generar los ingresos suficientes que les permitan mantener su cultivo de cannabis. Además, la espera para ver y disfrutar los frutos del trabajo puede resultar desafiante.
Afortunadamente, existen cepas que germinan más rápidamente que otras y algunas pueden desarrollar flores en solo unas cuantas semanas. Esta rapidez permite al agricultor identificar errores más rápidamente y mejorar su técnica de manera más eficiente.
Aroma
A pesar de la legalización del cultivo y consumo de cannabis en algunos lugares, sigue siendo considerado tabú por algunas personas. Por lo tanto, muchos agricultores optan por mantener su cultivo en secreto. Sin embargo, el fuerte aroma del cannabis puede delatar su presencia, especialmente en espacios cerrados.
Por suerte, existen tipos de cannabis con aromas más discretos, lo que, combinado con un sistema de ventilación eficaz, puede garantizar que el cultivo permanezca como un conocimiento exclusivo del agricultor.
Resistencia
El cannabis no es una planta frágil, sino más bien resistente y capaz de superar distintas enfermedades o plagas… dentro de ciertos límites. Sin embargo, estas amenazas pueden afectar la calidad del cultivo, por lo que es preferible eliminarlas lo antes posible. No obstante, la experiencia es fundamental para saber cómo manejar estos problemas.
Los agricultores principiantes cometen errores, lo cual es normal, pero en muchos casos estos pueden resultar en daños aún mayores a las plantas. El uso excesivo de fertilizantes, nutrientes o agua suele ser uno de los errores más comunes. Por lo tanto, plantar cepas con una mayor resistencia puede ser una buena estrategia para quienes están comenzando.
Aunque no garantizan una inmunidad total contra plagas y enfermedades, la resistencia adicional proporciona tiempo suficiente para investigar el método adecuado para tratar estos problemas si llegan a surgir.
Rendimiento
Pocas cosas motivan tanto como una cosecha exitosa con abundantes flores. Esto impulsa al agricultor a continuar intentándolo, realizando ajustes para mejorar el resultado en futuras cosechas. Por lo tanto, es recomendable plantar cepas que, desde el principio, prometan una producción considerable.
Tamaño de las plantas
Este aspecto suele pasar desapercibido por los agricultores principiantes. Dependiendo de la cepa, el tamaño de las plantas de marihuana puede variar significativamente. De hecho, más allá de los efectos que provocan, el tamaño es una de las mayores diferencias entre las plantas índicas y sativas. Por lo tanto, el tipo de cannabis es crucial para los principiantes, ya que un tamaño inadecuado puede afectar negativamente el producto final según el espacio disponible para el cultivo.