Ventajas de los cultivos externos
Los cultivos de cannabis tienen ventajas y desventajas muy específicas, sean internos o externos. Algunos de los problemas que se presentanlos cultivos externos, por ejemplo, se resuelven muy fácil (o ni siquiera se presentan) en los segundos. Aquí te dejamos una mirada generalizada de las ventajas que tendrá tu cultivo si tus plantas están en contacto directo con la naturaleza.
Los cultivos externos son generalmente más baratos y ecológicos
Entre las ventajas de los cultivos externos sin duda está su precio. En los primeros necesitas comprar bastante equipo para proveer a tus plantas con la cantidad necesaria de luz, aire y humedad, lo cual también termina reflejándose en tu cuenta de luz. Ese elevado consumo de energía, además, contamina. En los cultivos externos, por otro lado, todo eso queda en manos de la naturaleza.
Los cultivos externos pueden significar una mayor cosecha de cannabis
Los cultivos externos de cannabis también suelen tener la ventaja del espacio; no solo para que el cultivador se mueva entre ellas para regar y podarlas libremente, sino para que coseche plantas más grandes.
Solemos imaginar al cannabis como una planta pequeña; pero la realidad puede ser otra. El tamaño final de tus plantas es decisión tuya, y en un cultivo externo puedes hacer que crezcan muchísimo. Algunas incluso pueden alcanzar los 3 metros de alto, algo prácticamente imposible en un cultivo interno. Y, claro, el tamaño de tus plantas está directamente relacionado con el tamaño de su flor, que, finalmente, es lo que nos interesa. Es decir, un cultivo externo puede resultar en más producto.
Un cultivo externo no significa menos opciones
No tienes que vivir en el campo o tener acceso a un jardín para poder tener un cultivo externo de cannabis. Recuerda que no es una planta muy caprichosa y puede crecer en cualquier parte bajo las condiciones correctas. Esto incluye macetas en balcones y techos de la ciudad, donde también reciben todos los beneficios de la madre naturaleza.