Qué hacer con el cannabis sobrante

Nada más terrorífico que ver cómo tu reserva de cannabis, por una razón u otra, comienza a marchitarse. Si envejece lo suficiente, los cannabinoides como el THC pueden perder su efectividad. Por supuesto, consumir porro tras porro, pipa tras pipa, bong tras bong para ganarle a la fecha de caducidad no es para nada recomendable. No temas, aquí te aconsejamos qué puedes hacer con el cannabis sobrante.

Hacer mantequilla o cannabutter

Si de pronto te encuentras con que tu cannabis está peligrosamente cerca de su fecha de caducidad, nada mejor que hacer con el cannabis sobrante que infusionar mantequilla. Es, quizá, el ingrediente más versátil cuando se trata de comestibles: puede usarse para hacer galletas, brownies o hasta helado. Además, es muy sencilla de hacer; solo unos minutos en la cocina y tendrás materia prima para seguir disfrutando tu cannabis sin que se eche a perder.

Haz rosin

En general, los extractos de cannabis requieren, básicamente, de un laboratorio y equipo que no solo es carísimo, sino peligroso. Sin embargo, la rosin es uno que se puede hacer en casa sin mucho problema—solo necesitas calor y presión. Lo mejor es tener una prensa, pero incluso se puede fabricar con una simple plancha de pelo.

Infusiona aceite

Las moléculas de THC no se adhieren a cualquier sustancia. Afortunadamente para los entusiastas de los comestibles, les fascinan las moléculas grasas. Esto hace que infusionar aceite, ya sea de canola, de coco o cualquier otro, sea muy sencillo. Igual que la mantequilla, el aceite de cannabis es extremadamente versátil y se usa en un gran número de recetas—desde postres hasta comida gourmet.

Haz cápsulas

Y ya que has infusionado distintos tipos de aceites, puedes usarlos para rellenar cápsulas. Conseguir el equipo necesario no es difícil y con ellas tendrás pequeñas y discretas dosis de cannabis para el día a día.

Haz tinturas

Al igual que muchas recetas caseras de cannabis, las tinturas son extremadamente fáciles de hacer. Aunque algunas complican un poco las cosas, básicamente solo tienes que poner a remojar algunas flores en alcohol por un tiempo. Además, puedes consumirlas de distintas maneras: algunas gotas por encima de la lengua para efectos lentos pero duraderos; debajo para inmediatos de poca duración.